Catalá: «Nadie levanta un teléfono para decirle a un fiscal lo que tiene que hacer»

El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha defendido este miércoles la actuación de su departamento en las últimas operaciones contra la corrupción.

En su comparecencia ante la comisión de Justicia, en el Congreso de los Diputados, Catalá se ha declarado «indignado» por los últimos casos y ha explicado que su ministerio está «decidido a declararle una guerra sin cuartel a a la corrupción».

Catalá ha defendido la autonomía de la Fiscalía, frente a las acusaciones de supuestas injerencias en polémicas como el caso del 3% de la antigua Convergencia o la más reciente ‘operación Lezo’.

En este sentido, ha declarado que «la Fiscalía es un activo fundamental en la lucha contra la corrupción y garantizar los derechos de los ciudadanos, tenemos una Fiscalía 100% autónoma y libre, el Gobierno no puede darles ninguna indicación».

«No hay quien levante un teléfono para decirle a un fiscal lo que tiene que hacer», ha destacado.

Catalá se ha preguntado «a quién le viene bien crear alarmas innecesarias» y ha insistido en que, en el caso que ha llevado a prisión al expresidente madrileño Ignacio González, se realizaron todas las detenciones necesarias.

«Este ministro ni ha interferido ni interferirá nunca en una investigación judicial, y quien diga lo contrario miente con mala fe», ha reiterado.

El ministro ha reprochado a los grupos que cuestionen la labor de la Fiscalía y les ha recordado que que «la política no puede utilizarse para desprestigiar las instituciones ni a quienes las representan».

En este sentido, ha destacado que la Fiscalía es «de las más competentes» de todo el mundo y ha declarado sentirse «orgulloso» de los fiscales. «Nuestro Estado de Derecho no puede estar en mejores manos», ha concluido.